Eliminan cálculos renales con nuevo láser de última generación
Los hábitos del mundo actual y los factores ambientales están aumentando los casos de aparición de estos depósitos sólidos. Por ello, los especialistas recomiendan aumentar el consumo de agua y moderar la ingesta de carne y lácteos.
Fuertes dolores, vómitos y diversas molestias deben soportar diariamente las personas que sufren de cálculos renales, patología que presenta gran cantidad de casos en las regiones de Atacama y Coquimbo. Pero esta realidad comenzará a cambiar para muchas personas que se atienden en el Hospital de La Serena, y es que ahora el establecimiento cuenta con un láser que pulveriza los cálculos sólo en cosa de minutos y sin necesidad de realizar invasivas incisiones. Dos mujeres fueron las primeras pacientes intervenidas en el recinto de salud gracias a esta moderna tecnología.
Elizabeth Bugueño llegó desde Andacollo a la capital regional. A sus 40 años, ha pasado la mitad de su vida padeciendo de cálculos renales. “Me los descubrieron cuando estaba embarazada, los dolores fueron tan fuertes que pensaron que era producido porque mi hijo iba a nacer en ese momento, pero los exámenes confirmaron cálculos. A veces el dolor es tan invalidante que no puedes hacer nada más que recostarte y hasta eso te molesta”, comentó la paciente.
La historia no es muy distinta a la que ha vivido María La Paz, oriunda de Las Compañías, quien también sufre de estas dolencias desde ya muchos años (15 en total). “Es terrible porque vivo cada dia con dolor, te vas acostumbrando a eso, pero no es vida finalmente porque no puedes hacer lo que quieres”.
Ambas mujeres han sido operadas de cálculos renales en otras oportunidades, ya que sus propios organismos los producen con facilidad. Dichas intervenciones fueron realizadas con técnicas quirúrgicas más invasivas, por lo que tienen grandes expectativas con los resultados del nuevo método.
La litiasis renal o cálculos renales es una patología frecuente que afecta principalmente a hombres y se forman cuando la orina se concentra, propiciando la cristalización de minerales y sales y conformando lo que comúnmente llaman “piedrecillas”. El dolor que caracteriza esta enfermedad, y en ocasiones sangrado, se produce cuando el organismo intenta eliminar los cálculos por la vía urinaria, pudiendo afectar desde los riñones hasta la vejiga.
Desde hace 5 años, el equipo de urólogos del Hospital de La Serena viene trabajando una serie de proyectos que buscan incorporar tecnologías de última generación que permitan extraer cálculos de forma más efectiva y con una técnica mínimamente invasiva. Al respecto, el doctor Felipe Araya, urólogo del Hospital de La Serena señaló que “hoy estamos incorporando un equipo láser que viene a completar la tecnología de punta que nos faltaba, es importante mencionar que este equipo es del hospital, eso significa que vamos a poder hacer el procedimiento con mayor frecuencia y tenerlo a disposición de nuestros pacientes para que tengan una rápida recuperación, pocos días de hospitalización y puedan volver a su vida normal lo antes posible”.
Además, el facultativo explicó que “técnicamente lo que hacemos es entrar por los orificios naturales del paciente, ingresando a través de la uretra, subiendo por el ducto que conecta el riñón con la vejiga y con un hilo muy fino nos posicionamos frente al cálculo para pulverizarlo en cosa de minutos. Los pacientes no tienen incisiones, por lo que sangran menos y su recuperación es más rápida, además tienen menos riesgos de infecciones y deben estar menos tiempo hospitalizados. Con esta técnica, en 5 días la persona retoma su vida”.
LITHO 35: el nuevo láser que pulveriza los cálculos
Este nuevo láser quirúrgico “es una tecnología de última generación que entrega pulso de Holmio, lo que permite pulverizar cálculos al riñón sin dañar otros tejidos, convirtiéndolo en un procedimiento muy seguro, eficaz y de rápida recuperación para los pacientes. Este equipo tiene un costo cercano a los 34 millones de pesos y fue adquirido gracias al proyecto Pabellón a Punto”, explicó Rocío Ramos, encargada de Equipos Médicos del recinto asistencial serenense.
Esta técnica además de ser beneficiosa para el paciente, será muy positiva para el establecimiento de salud, porque al ser más eficiente, el Servicio de Urología podrá programar más intervenciones, aumentando la rotación de pacientes, lo que sin duda ayudará a reducir la lista de espera en esta especialidad, que hoy registra 247 personas en La Serena.
Así lo confirmo el médico Jefe del Servicio de Urología, el doctor Marcelo Alvear, quien indicó que “esto antes se solucionaba con una cirugía abierta más invasiva, que requiere tiempos de hospitalización mucho mayores. En cambio, con esta técnica, la recuperación es más rápida y la reinserción laboral muy pronta, no así una intervención abierta que tiene 2 o 3 semanas de licencia y con secuelas estéticas y funcionales. Esto nos permite ir ambulatorizando la atención, ya que tenemos un problema de falta de camas de hospitalización en la región y la población sigue creciendo, entonces es más efectivo para los pacientes y también para el sistema público”.