Niños con diabetes aprenden a disfrutar celebraciones en “Halloween sin Miedo”
En la Región de Coquimbo, más de 265 menores de 15 años han recibido tratamiento por esta enfermedad que ha ido en aumento en nuestro país. La idea es educar a las familias sobre alimentación saludable para que las fiestas no sean sinónimo de sufrimiento.
De cara a Halloween los más entusiasmados son los niños, pero ¿qué pasa con aquellos que no pueden consumir las irresistibles golosinas del 31 de octubre? Esta es la realidad de muchos pequeños que padecen diabetes tipo 1, una enfermedad que hoy no les impedirá divertirse en fechas como estas. Y es que el Hospital de La Serena reunió a pacientes pediátricos con esta patología y sus padres para enseñarles a disfrutar de celebraciones y festividades de una manera sana y entretenida.
El pequeño Sebastián González tiene diabetes y cuenta que le gusta mucho la fiesta de Halloween. Indica que planea salir a pedir dulces, pero que los va a “guardar para cuando le de baja de azúcar y pueda comer. Voy a tener cuidado de no comer mucho dulce”. Además, señaló que “me parece bien que nos hagan estas actividades porque son muy divertidas”.
“Halloween sin Miedo” es una iniciativa del equipo del Policlínico de Diabetes del Hospital San Juan de Dios, pionera en la Región de Coquimbo, y que busca educar a niños diabéticos sobre alimentación saludable, con sencillas técnicas que permiten mejorar su calidad de vida y dejar atrás las prohibiciones, para dar paso a una nueva forma de disfrutar de la comida, sin temores ni preocupaciones.
Bárbara Cepeda, nutricionista de este policlínico, explicó que la idea es “eliminar la palabra prohibición, los niños sólo deben saber contar carbohidratos. Por eso, hay que enseñarles a ellos con ejercicios prácticos y siempre trabajar en conjunto la parte nutricional y psicológica”. En tanto Fabiola Galleguillos, psicóloga del equipo, sostuvo que “hay que sacar el mito y el miedo de que ellos no pueden comer, ellos sí pueden hacerlo, adecuando su consumo y en esa tarea los papás tienen un papel clave”.
Mariela Elgueta, es madre de una niña de 10 años que padece diabetes y que fue diagnosticada cuando sólo tenía 5. “Cuando nos enteramos de su enfermedad fue un terremoto para nosotros, pero hemos tratado de instruirnos mucho sobre la enfermedad, hemos aprendido muchas cosas y con el tiempo, nos hemos dado cuenta que no es tan complicado. Los niños con diabetes tipo 1 pueden disfrutar igual que el resto, la disciplina es súper importante, pero pueden comer de todo, cuidando el azúcar y los carbohidratos”, indicó. A ello, Norma Villarroel, otra madre de una pequeña con esta patología, agregó que “es difícil, pero hoy en el mercado tenemos de todo como para que ellos también puedan disfrutar”.
La diabetes es una enfermedad cardiovascular crónica que se produce cuando el páncreas no genera suficiente insulina o el organismo no la utiliza eficazmente. Existen dos tipos de diabetes, la diabetes tipo 1, denominada insulinodependiente o juvenil, que se caracteriza por la ausencia de síntesis de insulina y ocurre con mayor frecuencia en los niños y adultos jóvenes, pero puede aparecer a cualquier edad, y diabetes de tipo 2, denominada no insulinodependiente o del adulto, que tiene su origen en la incapacidad del cuerpo para utilizar eficazmente la insulina, lo que a menudo es consecuencia del exceso de peso o la inactividad física. Aunque es más frecuente en la adultez, actualmente también se está manifestando en niños.
“La diabetes tipo 1 es una enfermedad autoinmune en que la edad de presentación es menor que la tipo 2, que se da básicamente en la adultez. El pick de presentación es en la niñez y adolescencia, pero se ha visto cada vez en niños más chiquititos que debutan con esta patología”, afirmó la Doctora Constanza Montesinos, pediatra encargada del Policlínico de Diabetes del Hospital de La Serena
Cabe señalar que en nuestro país y región la diabetes ha ido en aumento, principalmente por la falta de mantención de un estilo de vida saludable. En lo que va del 2018, 265 niños menores de 15 años han recibido tratamiento en la Región de Coquimbo producto de esta enfermedad. Por ello es fundamental hacer énfasis en que los tres pilares del tratamiento para niños con diabetes tipo 1 es mantener una alimentación saludable, realizar actividad física permanente y seguir su tratamiento mediante insulina.