Niños y adolescentes con diabetes tipo uno mejoran su calidad de vida gracias a moderno sensor de glicemia
Durante la pandemia, la diabetes en Chile creció de manera explosiva y hoy habría 500 mil nuevos casos, siendo la cuarta patología de mayor prevalencia en el país.
Sebastián Gonzáles es un adolescente de 13 años que debutó con diabetes tipo uno en el año 2022, requiriendo una hospitalización de urgencia en ese momento, ya que presentó una alta concentración de azúcar en su cuerpo, situación que puso en riesgo su vida; “a partir de ahí, mi vida y la de mi familia cambió para siempre” comenta el joven. Cada paciente con diabetes debe puncionar sus dedos unas 8 a 10 veces cada día, lo que en el año se traduce en más de 3 mil pinchazos, realidad que Sebastián y otros 59 pacientes que se mantienen en control, dejarán atrás gracias a un importante proyecto impulsado en el Hospital de La Serena, que viene a mejorar la calidad de vida de los niños y jóvenes que padecen esta enfermedad, transitando desde un sistema de punciones a uno de escaneo de alta precisión.
Y es que se trata de una moderna tecnología diseñada por Abbott, que ofrece un amigable dispositivo que permite controlar y monitorizar la glicemia en sangre del paciente. El sensor de glucosa se adhiere al brazo de la persona con diabetes y va recogiendo la información que encuentra en los tejidos. Se debe cambiar cada 14 días y se puede escanear con el celular para ver los niveles de glicemia. Además, la información que se extrae, se sube a una nube, para que así los pacientes y los médicos puedan acceder a los registros en tiempo real, lo que permite efectuar un adecuado control de la patología.
Los pacientes con diabetes deben mantener un riguroso control de sus niveles de glicemia para ir ajustando las dosis de insulina que deben inyectarse y las cantidades de alimento que pueden ingerir. Por ello, este sistema de monitoreo resulta fundamental tanto para el equipo de salud como para las familias de los pacientes.
Así lo confirmó la nutrióloga pediátrica impulsora del proyecto, la doctora Camila Muñoz, quien señaló que los beneficios del nuevo sensor son múltiples, “y no sólo son para el paciente, sino que también para la familia. Debemos recordar que la diabetes tipo uno es una enfermedad crónica, esto quiere decir que es para toda la vida, por lo tanto, desde el momento del debut, a los pacientes y a su núcleo familiar les cambia la vida. Los sensores de glicemia no solamente entregan la formación del momento si no que también nos proporcionan la tendencia, si el paciente va hacia la baja o el alza, por lo tanto, eso nos permite definir mejores conductas e individualizar el tratamiento”.
La diabetes tipo uno, o también llamada insulinodependiente, juvenil o de inicio en infancia, se caracteriza por una producción deficiente de insulina y requiere la administración diaria de esta hormona. Se desconocen aún las causas de la enfermedad y hasta el momento no es posible prevenirla, por lo que los esfuerzos que permitan una mejor calidad de vida son tremendamente valorados por los pacientes y sus familias.
Con esta iniciativa, el Hospital de La Serena se sumó a los recintos de salud que abordan esta enfermedad con tecnología de vanguardia, beneficiando a 60 niños y jóvenes del policlínico de pediatría del CDT. Para concretar la entrega se realizaron dos jornadas, en las que expertos capacitaron a las familias sobre el uso del dispositivo, entregando el kit completo que incluye un celular y el sensor.
En la capacitación participó Patricia Vega, madre de Antonella Ortiz que debutó a los cortos 7 años con diabetes, quien agradeció la entrega de esta herramienta que viene a facilitar la cotidianeidad de sus vidas “estamos muy contentos porque es un ayuda para nuestros hijos, es agotador que se estén pinchando sus deditos y esto les entrega más facilidades para que tengan un poco más de libertad, se controlen mejor y queden más estables y tranquilos, al igual que nosotros”.
La medida fue valoradapor el Delegado Presidencial, el doctor Rubén Quezada quien señalo que “el Hospital de La Serena da dos grandes avances con esto, primero se suma a lo que ha sido una mayor cobertura a nuestra seguridad social, parte de lo que al principio fue el copago 0, luego la incorporación de nuevas prestaciones al GES y segundo robustecer las distintas alternativas, en este caso, pudiendo poner a disposición de niños y niñas y sus familias un monitoreo continuo de glucosa para pacientes con diabetes tipo uno”
En esta misma línea la Seremi de Salud, la doctora Paola Salas recalcó que “sin duda la diabetes hoy día tiene una tremenda importancia para nuestro país y en especial para nuestro gobierno que ha querido avanzar en seguridad social. La diabetes ha crecido en un mayor número, las encuestas así lo demuestran, partimos con una prevalencia del 3% luego rápidamente, en menos de 10 años, llegamos al 12% y hoy se sabe que con la pandemia esta patología aumentó nuevamente, así es que el poder hoy atender a nuestra población infantil es clave ya que nos permite avanzar en tecnologías que mejoran la calidad de vida de ellos”.
Un equipo detrás del logro
El equipo del policlínico de diabetes pediátrico del CDT del Hospital de La Serena, está conformado por una nutrióloga, una pediatra dedicada al tratamiento endocrino pediátrico, una nutricionista, y una enfermera, quienes en conjunto mantienen en control a cerca de 67 pacientes.
Iván Marín, director del Hospital de La Serena hizo hincapié en que este tipo de esfuerzos son parte de la tarea que tiene la institución al ser ejecutora de políticas públicas “nosotros estamos en la obligación de brindar una atención con la más alta eficiencia porque eso nos asegura acercar la salud a la gente y esa es nuestra tarea de todos los días.”
Desde el Servicio de Salud Coquimbo valoraron también la mejora, así lo relevó Germán López, director de la institución “los hospitales deben acompañar sus buenas prácticas con tecnología, para poder dar respuesta a las necesidades que hoy tenemos de nuestra población.”